¿Por qué un candidato pasivo es importante para las empresas?

Que una persona no esté buscando empleo porque ya tiene uno, no significa que no pueda estar interesado en escuchar otra propuesta laboral, valorarla y participar en un proceso de selección de personal en el que tenga la oportunidad de negociar sus condiciones y mejorar, eventualmente, su desarrollo profesional. Las personas en este caso se conocen como candidatos pasivos.

Varios estudios indican que 3 de cada 4 candidatos pasivos están dispuestos a escuchar a un reclutador que les ofrezca otra oportunidad laboral.

Generalmente, cuando una empresa busca cubrir un puesto de trabajo se centra en los candidatos que responden a la publicación de su oferta de trabajo y que se ponen en contacto con los reclutadores (internos o externos) para hacerles llegar su CV.

Estos son los candidatos activos, aquellos profesionales implicados en la búsqueda de empleo, ya sea para encontrar un puesto con mejores condiciones que las que tienen o para integrarse en el mercado laboral de nuevo o por primera vez.

Sin embargo, hay casos en los que se requiere hacer una búsqueda dirigida hacia el talento que se considere más efectivo para cubrir determinado puesto, y entonces ésta se orienta hacia personas específicas. Como dijimos, éstas no dedican esfuerzos a rastrear ofertas de empleo porque ya trabajan, y, en muchos casos, se encuentran satisfechos con sus situaciones laborales.

Reclutar candidatos pasivos, tiene su chiste…

Contratar a un candidato pasivo no es tarea fácil. Es necesario valorar las posibilidades de que le interese integrarse a un proceso de selección de personal. Un buen reclutador debe aprender a detectar perfiles con potencial para una empresa, aunque ya tengan empleo.

Pero para que esto ocurra, los reclutadores deben ser capaces de dos cosas:

• Identificar y localizar a estos candidatos pasivos.

• Contactarlos y comunicarles su interés de que se unan a una nueva organización.

Por si fuera poco, la cotización de los candidatos pasivos es especialmente alta en sectores o cargos en los cuales la combinación requerida de experiencias, formación y habilidades no es fácil de encontrar.

Aunque en la actualidad hay más candidatos activos que nunca, los candidatos pasivos siguen siendo enormemente apreciados.

¿Qué les hace tan especiales?

¿Por qué tomarte el tiempo de convencer a un empleado presumiblemente satisfecho en su empleo de venir a trabajar para tu organización cuando tienes cientos de candidatos solicitando el trabajo de forma voluntaria?

Linkedin realizó un estudio entre una muestra de 3,300 personas alrededor del mundo, en el que se concluye que los candidatos pasivos presentan las siguientes particularidades en comparación con los activos:

• • Son mucho más proclives a crear impacto en la empresa.

• • Desean un trabajo más desafiante.

• • Son más propensos a desear una cultura corporativa que se ajuste en mayor grado a su personalidad.

• • Tienen menos probabilidades de necesitar formación de desarrollo de habilidades.

• Su curva de aprendizaje en el cargo suele ser de menor duración.

¿Cómo captar candidatos pasivos?

Hoy en día,  los reclutadores tienen varias opciones para atraer la atención de perfiles profesionales con estas características, gracias a las comunidades virtuales, las redes sociales, las bases de datos o los eventos que se pueden organizar con ese fin.

La fase de contacto es una parte muy sensible del proceso, por obvias razones. Se requiere aplicar ciertas técnicas que solamente los buenos reclutadores manejan.

Enfrascarse en reclutar candidatos pasivos puede significar una gran inversión de tiempo y de esfuerzo, sobre todo sin ayuda de consultores externos. Lo más recomendable es externalizar los procesos de selección de este tipo, a través de reclutadores altamente especializados.

En CTQ Human Capital contamos con amplias redes de contacto que nos dan acceso inmediato a candidatos pasivos de gran calidad.