¿Los robots nos quitarán nuestro trabajo?

La inteligencia artificial está cada vez más presente en nuestras vidas, y el debate sobre los peligros de la misma en el ámbito laboral continúa. ¿Deberíamos estar preocupados?

Según la Organización Internacional del Trabajo, para 2020, cerca de 137 millones de trabajadores en el sureste de Asia perderán su empleo.

La firma de estudios PwC reportó que, en 15 años, los robots sustituirán al 38% de los trabajadores estadounidenses, el 30% en Inglaterra, 35% en Alemania y 21% en Japón.

Antes de empezar a imaginar un mundo controlado por las máquinas, debemos recordar los logros del diseño AI, el cual es el mejor asistente en áreas como Recursos Humanos, o asistencia personal como la voz Alexa de Amazon o la ya famosa Siri.

En 2016, la inversión por parte de empresas en AI fue de 3.9 millones de dólares y ha impulsado en gran manera a la economía de China, Japón y Estados Unidos. La decisión de usar o no dispositivos depende de factores económicos y temporales, ya que es más barato optimizar un software que capacitar a una persona. También ofrece la agilización e inmediatez de procesos.

Entonces, ¿deberíamos preocuparnos?

Sí y no. Según The Guardian, el 80% de los estadounidenses no creen que en 50 años sus trabajos se vean afectados.

El problema no es la sustitución humana, ya que sí habrá empleos, pero estarán más dirigidos a la ingeniería y desarrollo de tecnologías. ¿Recuerdas que el papá de Charlie fue despedido de la fábrica de pastas de dientes, solo para ser contratado después para reparar la máquina que le había quitado el empleo? Pues ese es el ejemplo perfecto de lo que podría pasar en un futuro.

La buena noticia es que la capacitación constante a la que tenemos acceso nos da la oportunidad de ser indispensables. Es decir, lograr ese “plus” de habilidades que te convierta en la última opción para ser despedido o reemplazado. Y ojo, porque el reemplazo no necesariamente será por parte de un robot